Según reportes de la agencia de noticias estatal de corea (KCNA), este lunes, explotó un cohete lanzado por Corea del Norte que tenía el objetivo de extender un satélite de espionaje hacia Estados Unidos Y Corea del Sur, a pesar de que la ONU prohíbe a Corea del Norte realizar este tipo de lanzamientos, por lo cual se ha generado gran controversia y descontento entre los países cercanos.
Los informes estatales indican que el cohete explotó durante un vuelo de primera fase minutos después de despegar, debido a una presunta falla del motor.
El subdirector de la Administración Nacional de Tecnología Aeroespacial afirma que la explosión se relaciona con la operación del motor de oxígeno líquido y petróleo que recién se implementaba, aunque no se descartan otras posibles causas que según los especialistas, también deben ser investigadas.
Debido a estos sucesos, el gobierno Japones emitió una alerta de ataque con misiles a la prefectura de Okinawa, la cual no duró mucho tiempo, y se recomendó a los ciudadanos estar preparados para refugiarse en lugares seguros. Sin embargo, esta alerta pronto fue cancelada y se descartó cualquier amenaza.
Antes de lo ocurrido, el mismo lunes, Corea del Norte avisó a la guardia costera de Japón, que lanzaría un cohete satelital sugiriéndoles precaución frente al movimiento que se generaría cerca del territorio marítimo con actividad que se extendería hasta el 3 de junio.
Corea del Norte, en declaraciones públicas, se ha mostrado como un país autónomo para decidir acerca del lanzamiento de cohetes, a pesar de las prohibiciones externas.
Frente a lo ocurrido hoy, el ministro de Defensa japonés, Minoru Kihara, se refirió al lanzamiento como un reto para el mundo y como una provocación hacia la seguridad de las regiones vecinas.
El presidente surcoreano, Yoon Suk Yeol, propuso una acción internacional severa si Corea del Norte sigue adelante con su plan de lanzamientos. Por su parte, el primer ministro de Japón Fumio Kishida, le pidió a Corea del Norte, retirar su plan de lanzamiento.
Este lanzamiento fallido, es un golpe al plan de Kim Jong-un, el dictador norcoreano actual, de lanzar otros tres satélites espías militares durante este año, sin contar los dos lanzamientos fallidos que ocurrieron en noviembre del año pasado.
Los reportes oficiales, confirman que Corea del Sur antes del incidente, detectó una trayectoria de lanzamiento que levantaba la sospecha de ser un satélite de espionaje disparado desde el principal centro espacial norcoreano a las 10:44 p.m. del lunes. Pocos minutos después se observarían los fragmentos de la aeronave esparcidos en el océano.
Redacción. Carolina Chaves Forero
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